Con las rocas rojas de Sedona de fondo, Rachel se ríe con alegría genuina mientras James le lee sus votos matrimoniales.
En una era en la que nada parece seguro y el cambio se ha convertido en la norma, Rachel y James decidieron comenzar su vida matrimonial juntos en un destino que ha resistido la prueba del tiempo. Después de pasar mucho tiempo discutiendo la mejor manera de planificar una boda durante una pandemia mundial, la pareja eligió Bell Rock en Sedona, Arizona, como el escenario perfecto para la ceremonia de su boda. Anclado en el corazón del desierto y reflejando la belleza que lo rodea, este lugar significó el comienzo de una larga y feliz vida juntos.